Muchos propietarios de alquiler vacacional cometen errores al comenzar en este mundo. Por eso es importante estar informado de las cuestiones y problemas que pueden surgir durante el proceso. En esta guía te contamos cuáles son los errores comunes en alquileres vacacionales y cómo puedes evitarlos como propietario.
La decisión más importante a la hora de iniciarte en el mundo del alquiler vacacional es la compra de la propiedad. En este caso, deberás evaluar correctamente la ubicación y el valor de la misma. Pensar en el perfil de tus futuros huéspedes es también fundamental.
¿Prefieres turistas internacionales, locales o viajeros ocasionales? Fijar estas preferencias te puede ayudar a decidir entre un tipo de alquiler de vivienda u otro, por ejemplo, a la hora de optar por una vivienda más grande o pequeña.
Si optas por adquirir una vivienda para fines turísticos que necesita una renovación, tendrás que pensar en los gastos relacionados con las obras y reposición de elementos.
Lo fundamental es intentar no pasarse del presupuesto inicial Además, ten en cuenta el tiempo que te llevará hacer el saneamiento, ya que durante esos meses no podrás recibir a huéspedes. Decidir entre un alquiler habitual o un alquiler de temporada es una buena forma de fijar objetivos.
Adquirir una propiedad conllevará unos gastos que, en muchas ocasiones, pueden llegar a ser altos. Por ejemplo, los gastos de comunidad son fijos y, aunque pueden variar según el tipo de finca, a veces tendrás que enfrentarte a derramas de la comunidad.
Además, otros gastos comunes como la luz, el agua, los impuestos de recogida de basuras y los impuestos anuales sobre la renta y la propiedad pueden ser altos. Si dedicas tu vivienda al alquiler vacacional, algunos de estos podrás ser gastos deducibles, pues quedarán cubiertos con los beneficios que saques.
A la hora de amueblar, ten en mente a tu público objetivo y sus necesidades. Si tu piso turístico está en la ciudad, la cocina solo necesitará lo imprescindible, mientras que una casa rural necesitará más elementos.
El mobiliario debe ser práctico y a la vez resistente, pues dará una mejor imagen y te durarán más años. No pienses que por que sea una vivienda de alquiler la calidad debe ser inferior. Además, las imágenes en las plataformas de alquiler también saldrán mejor y tus invitados se llevarán una mejor impresión.
Cuidar tu vivienda vacacional y mantenerla perfecta para cada huésped es lo ideal. No pases por alto los pequeños desperfectos, ya que pueden acabar siendo el origen de malas críticas de tus visitantes. No olvides realizar siempre una limpieza periódica a fondo que evite males mayores.
Ofrecer tu alquiler vacacional demasiado caro o demasiado barato no es la mejor idea, ya que puede llevar a confusión.
Si el precio es demasiado caro, se lo estarás poniendo fácil a la competencia, mientras que si es demasiado bajo pueden pensar que hay algún problema. Las herramientas de precios dinámicos pueden ayudarte a conseguir un precio razonable, tanto en temporada alta como baja.
No hace falta que estés siempre disponible para tus invitados, pero si es conveniente no dejar pasar mucho tiempo a la hora de confirmar las reservas o si ocurre una emergencia.
Dejar un teléfono de contacto para que tus huéspedes puedan ponerse en contacto contigo o una persona de confianza que pueda atender en caso de necesidad debe ser una prioridad para ti.
Utilizar un channel manager como Smoobu para gestionar estas comunicaciones es una buena solución. Así puedes controlar la comunicación con tus huéspedes de forma centralizada y automatizar mucho gracias a las plantillas de correo electrónico.
Los alquileres vacacionales no son siempre bienvenidos en una comunidad de vecinos. La despreocupación de los turistas, con ruidos, tránsito constante y por la a veces falta de control sobre estas actitudes han reportado una mala fama acerca del alquiler turístico.
Por eso, antes de lanzarte a anunciar tu vivienda en los portales de alquiler, considera informar a tus vecinos sobre tus planes. Ellos también pueden ayudar a tus huéspedes en caso de emergencia e informarte si hay alguna molestia por el ruido.
Aunque el objetivo es proporcionar a tus invitados la experiencia más agradable posible, al fin y al cabo cada vivienda tiene sus propios trucos y normas que hay que tener en cuenta.
¿Cuáles son los horarios de basura en tu comunidad? ¿Cómo regular la temperatura o conectar el Wi-Fi? Todas estas cuestiones son importantes para tus huéspedes y para el correcto funcionamiento de tus electrodomésticos y aparatos.
Dejar toda esta información en una guía de bienvenida, incluso antes de que tus invitados lleguen al alojamiento, es lo mejor.
Si no sigues los requisitos legales o no pagas los impuestos correctos por tus ingresos, puede salirte muy caro.
Los alquileres vacacionales están regulados mediante normas para impedir la mala praxis de los dueños. Seguir estas regulaciones es de vital importancia, ya que por el contrario tu alquiler turístico podría peligrar. En las ciudades donde la oferta de vivienda de alquiler es escasa se aplican restricciones adicionales.
Infórmate sobre las normativas locales de tu ciudad para saber en qué casos no podrías poner tu propiedad en alquiler.
Un contrato de alquiler te asegura las espaldas como propietario en caso de problemas con tus huéspedes. No necesita ser un contrato complicado.
Simplemente puedes hacer mención a las fechas de entrada y salida, los datos de los inquilinos, el método de pago, los servicios de hospedaje que se incluyen, y demás información relevante, así como las normas de la casa.
El alquiler turístico es una actividad económica, y por lo tanto es obligatorio pagar impuestos sobre los ingresos de tu alquiler vacacional a la agencia tributaria.
Mantener al día los libros de contabilidad, las facturas y los contratos te ayudará a la hora de realizar los pagos. Contar con los servicios de un contable, en caso de que no estés familiarizado con esto, es recomendable.
Muchas pólizas de seguro de hogar excluyen explícitamente los daños causados en el alquiler. Cuando elijas un seguro, asegúrate de que el alquiler entra dentro de las coberturas o contrata un seguro para alquiler vacacional concreto.
¿Crees que puedes quedarte con la fianza si se rompe algo? Por desgracia, no es tan fácil, porque hay que poder mostrar los recibos de la reparación, etc. Como suele decirse, prevenir es mejor que curar, así que no dejes a la vista objetos de valor, documentos o posesiones personales que puedan ser sustraídas o dañadas.
Si ofreces tu alquiler vacacional en varias plataformas como Airbnb, Booking.com o Vrbo, es fácil que se produzcan dobles reservas. Para ello, contar con un motor de reservas potente es fundamental para gestionar de forma segura, sencilla y profesional tu alquiler turístico.
Como has podido observar, un alquiler vacacional es un tema serio que puede traerte muchas ventajas pero también problemas si no estás bien informado. Sopesa todas las posibilidades antes de realizar una inversión y ajústate siempre a la legalidad.
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